El mayor limitante para adoptar y cultivar nuevos hábitos, es el apego
Cambiar o modificar tus rutinas exije gallardía y autoestima. Gallardía para abandonar aquello que te ayudó a crecer y lograr. Autoestima para superar el malestar que produce lo que tu mente pueda opinar.
Somos lo que superamos, lo que vivimos, no lo que compramos o adquirimos. Antes de soltar, lo que debas cambiar, agradece lo que esos hábitos y rutinas, te permitieron cosechar. Detente, respira y morando en calma, celebra la vida.
Un vencedor evita alimentar su ego practicando desapego. Para reinventar sus rutinas, apaga el piloto automático, se sintoniza con la frecuencia universal y conectado con su esencia gana gallardía y autoestima que le permite cambiar.
Agradece todo lo que hasta hoy has conquistado o por tu buen proceder, adquirido y cosechado. Vencedor; celebra, ríe y afirma «Conectado a mi esencia abundante, dejo ir lo que soy y continuo adelante»
¡Celebra la Vida, ríe y deja reír!
La imaginación es la mitad de la enfermedad, la tranquilidad es la mitad del remedio y la paciencia es el comienzo de la cura
Gracias, gracias, gracias y bienvenida seas abundancia
Autor: Freddy Villavicencio